Jesolo, la más finita de todas

Al Crítico se lo vio un poco exaltado. Parece que, una vez más, estuvo discutiendo sobre cómo es la verdadera pizza ¿Finita o alta? ¿Crocante o esponjosa? ¿Cargada o austera?

En La Plata, hay gente que cree que la buena pizza (o la “verdadera pizza”) es la que tiene la masa más delgada y crocante. Lo cierto es que no existen pizzas buenas o malas. Es el gusto de cada persona el que manda: la pizza que para José es la mejor, para Mario puede ser la peor. En definitiva, una pizza es buena cuando satisface las expectativas de quien la consume. Punto.

Por otro lado, la Vera Pizza Napoletana (la pizza por antonomasia) no es ni tan delgada ni tan crocante. Todo lo contrario: su masa es gomosa y mide poco menos de medio centímetro de alto en el centro y dos centímetros en el borde o cornicione.

Pero, ¿qué tiene que ver toda esta perorata con Jesolo? Es simple: en Jesolo hacen las pizzas más finitas y crocantes de la ciudad y, además, se declaran como la “primera pizzería italiana de La Plata” ¿Esto quiere decir que pueden ser las mejores? Habrá que indagar un poco para saberlo…

Jesolo funciona en una antigua casona reciclada. Al ingresar al salón se perciben dos cosas: el estilo descontracturado que dan las paredes llenas de ilustraciones y colores, y un aroma a oliva y rúcula impresionante.

Ofrecen una variedad de pizzas acotada: once clásicas y tres blancas (estas últimas vienen con queso brie y sin salsa de tomates). Es necesario recalcar que se trata de pizzas con una masa extremadamente finita, tan finita como un papel. Aunque tienen los bordes bien crocantes, en el centro de la masa el piso está tostado lo justo y necesario (inteligentemente, porque al ser tan delgadas, si tuvieran más piso, se transformarían en galletitas). Más allá de su poca altura, la masa es saladita y sabrosa. Vale destacar que cocinan en horno a leña.

El resto de los ingredientes, a simple vista, parece un poco escaso. Pero con una masa tan finita, agregar más mozzarella, más morrones o más tomate generaría únicamente un enchastre. En fin, en estas pizzas hay un perfecto balance entre la altura de la masa y la cantidad de ingredientes que tienen encima, por más que éstos parezcan insuficientes.

En cuanto a la atención, es correcta. Y la demora, normal (teniendo en cuenta que el salón no estaba lleno por ser día de semana). Las pizzas llegaron a la mesa en 15 minutos.

Dato para destacar: en Jesolo no utilizan mejunje arriba de la mozzarella, pero en cada mesa puede verse una botellita con aceite de oliva para agregar a gusto.

Finalizando, si bien la masa (seguramente inspirada en alguna pizzeria de la región del Véneto) difiere de la que se come en el sur de Italia, en Jesolo respetan una de las características más importantes de la pizza: la simpleza.

Teniendo en cuenta la preferencia de los platenses por las pizzas finitas y crocantes, ¿se podría afirmar, entonces, que las de Jesolo son las mejores pizzas de La Plata? Imposible saberlo. ¡Bah! Habría que preguntarle a José… O tal vez a Mario.

Fecha de visita: agosto/2016

Precio: moderado/alto ($ 154 la napo)
Suggerimenti: si sos amante de las pizzas finitas, Jesolo es tu lugar. Si te gustan las pizzas altas o bien cargadas, andá buscando otra pizzería en la sección Pizzerías.
Lo que le gustó al Crítico: la suavidad de la Luna Vecchia,una “blanca” con trozos de espinaca, salsa blanca, cebollita y Brie(algo distinto a lo de siempre).
Lo que no le gustó al Crítico: la calidad del aceite de oliva en la mesa (podría ser un poco mejor) y que cobren cubiertos sin ofrecer ningún tentempié.